lunes, 13 de noviembre de 2017

Somos Sincretismo

El funcionamiento del pensamiento humano sigue siendo uno de los sistemas más complejos que, por lo menos hasta el momento, no ha sido posible develar.

El pensamiento, el ser, y muchas otras incógnitas que incomodan al ser humano común en su día a día ha representado siempre, desde los inicios de la historia conocida del hombre, un fascinante enigma.

Quiero iniciar, de nuevo con una aclaración, una que tal vez sorprenda a algunos allegados a mi persona, ya que, por lo general es un tipo de tema que no tengo motivo alguno para sacar a flote. Soy católico. Dejando de lado la imposición familiar tan natural en este bonito país, y tras haber vivido y seguir viviendo en un constante camino de busqueda personal y espiritual es que me atrevo a decir que lo soy por convicción.

Así mismo, quiero decir que leerás a continuación es una opinión, como todo aquello que encontrarás en este blog. Sobre todo, algo escrito sin el afán de ofender a nadie.

La palabra SINCRETISMO, puede entenderse de manera muy básica, como la conjunción de distintas ideas, actitudes u opiniones. Existe el sincretismo filosófico, como la combinación que se encarga de conciliar doctrinas diferentes. Mucho de lo que conocemos hoy en día es un resultado del sincretismo de todo tipo de situaciones. Desde sistemas económicos, políticos, artísticos y hasta deportivos.

"Sincretismo", también es ahora, una obra que galardona una de las calles más concurridas de los feligreses de la ciudad de Guadalajara. Si me lo preguntan, es una muy bonita escultura que representa de manera clara el significado de la palabra anteriormente mencionada. Arte creada por Ismael Vargas que ha desatado un verdadero revuelo que poco a poco ha ido tomando un aspecto interesante, uno que me gustaría señalar pues creo que refleja perfectamente lo que somos como sociedad mexicana.

Para todos aquellos que no reconocen de lo que se trata de plasmar en la obra de Vargas, la escultura claramente es una representación en perfecta armonía de la imagen de la Virgen de Guadalupe fusionada con la diosa Prehispánica Coatlicue, señora de la vida y de la muerte.

De forma totalmente predecible, las reacciones de aversión hacia dicho arte no se hicieron esperar. Lo primero que la sociedad tapatía recriminó –y como culparlos en todo caso- fue el altísimo costo de la obra (5.2 millones de pesos mexicanos) para una obra que en un principio había sido donada por su creador y posteriormente adquirida por el gobierno municipal de la región según diversas fuentes.

Y antes de que alguien pudiera gritar “Cortés” las quejas católicas ya iban subiendo de manera exponencial. Marchas y comentarios por todas partes inundan el internet con cosas como “Somos Guadalupanos”, “Es una ofensa para la Virgen de Guadalupe” o “Es una aberración”.

No cabe duda, los críticos del arte son muy crueles siempre.

Como mexicano, me resulta ilustrativo. Como católico, me resulta irónico.

Todo mundo dice que México es un bonito lugar de contrastes. Desde la geografía fusionando desiertos con playas, selvas con bosques renaciendo de manera tan sutil que cuando los visitantes extranjeros vienen no pueden evitar irse completamente extasiados con tal despliegue de naturaleza. Otro contraste que tenemos con el mundo es esa bonita cultura histórica que no lleva más de un par de siglos de antigüedad.


(mamá Coatlicue, vestida de colores que me suenan a algo)

A comparación de otros, somos un país bastante joven. Pero uno que tiene una vasta marca territorial. Vivimos en un país en donde les encanta hablarnos de “nuestra historia”. Los sistemas educativos en general tienden a mostrar las cosas de manera parcial, no solamente aquí. El mundo globalizado tiene dicho menester el fusionarlo todo poco a poco hasta que los detalles de lo que éramos se vayan difuminando de manera gradual pero certera con el paso de los años.

Historias parciales envueltas en mentiras piadosas. Mentiras que nos hacen ignorantes.

Sin el afán de molestar, me gustaría haber ido el día de dichas manifestaciones para preguntar algunas cosas a mis queridos hermanos enfurecidos. En primer lugar, me encantaría saber si conocen el significado de nuestra palabra del día. En segundo lugar, preguntaría si de verdad conocen la verdad histórica de la imagen de la Diosa Coatlicue. Les preguntaría si saben qué fue lo que pasó en todo el continente entero cuando Europa antigua supo que había ganado la batalla.

Uno podría pensar que el sincretismo en nuestro país, dio inicio con gente como el venerable Bernardino de Sahagún. Personas como él fueron piezas importantes para convertir a los pobres e ignorantes habitantes de la neonata Nueva España. Toda américa latina fue víctima de dicha invasión bélica, territorial y por supuesto, filosófica.

Genios como Sahagún supieron aprovechar lo mejor del Sincretismo para apaciguar a un pueblo vencido, triste y desesperado. Pueblo que poco a poco veía como le era arrebatado todo aquello que le daba identidad. Recomiendo ampliamente un par de libros muy interesantes y de fácil acceso si es que el tema les llegase a interesar. En primer lugar está “La Visión de los Vencidos” de Miguel León-Portilla, en donde encontrarán de manera más clara y bien explicada la transformación de los pueblos de la región en lo que ahora conocemos como México así como regiones no tan cercanas.

Pero incluso personas como Sahagún, seguramente tomaron la idea del Sincretismo de otra fuente mucho más confiable, una que por supuesto ya había mostrado que de manera clara que había cierta garantía al momento de combinar creencias en sistemas religiosos amplios y novedosos. Siempre y cuando fuera a su manera por supuesto.

Y es que mucho tiempo atrás, cuando los primeros Aztecas llegaron de aquel largo viaje que les tomó aproximadamente un siglo desde la legendaria Aztlán que se valieron entonces del Sincretismo para establecer el nuevo sistema de creencias, todo con el paso de los años. Podría sonar extraño, pero así fue.

Para sentar los hechos de manera simple, los Aztecas fueron una de aquellas civilizaciones del mundo-por supuesto que no la única- en combinar sus dioses primarios: Huitzilopochtli y Tezcatlipoca junto con los dioses que ya existían y que también llegaron desde diversos lugares, Tlaloc y Quetzalcoatl. El panteón Azteca es rico y maravilloso, pero la mayoría de sus creencias fueron establecidas, al menos en parte, gracias a cierto nivel de sincretismo. 

(El Templo Mayor está ubicado de manera "curiosa" cerca de la Catedral en la ciudad de México.)

Igualmente, si es que les interesara saber mucho más sobre la historia de las civilizaciones anteriores a la nuestra les recomiendo mucho el maravilloso y por supuesto que serio y formal “El Universo de los Aztecas” de Jacques Soustelle. Casi siempre ocurre así, gente de fuera tiene una mayor curiosidad en conocer lo que pasa en países a los que no pertenece.

Si la población en general no sabe esto, es una situación por la cual realmente no los culpo. En primer lugar a mi parecer, nunca ha estado en el plan de la gente que gobierna este país el tener gente pensante y culta. Sin embargo, la poca información que existe está ahí para que cualquiera la conozca. Conocer dicha información te hace libre, te cura el fanatismo.

No puedo llamarlo de otra manera,  no cuando las personas no pueden defender con mayores argumentos sus puntos de vista. La forma limitada en la que expresan su malestar es algo que de verdad me preocupa. Ya que si algo he aprendido es que un fanático siempre representa 3 cosas: ignorancia, necedad y peligro.

De esta manera, la obra de Ismael Vargas sí que me hace levantar una ceja y me pone a pensar en lo limitada que sigue siendo la cultura en que vivimos cuando siempre hay un espacio de tolerancia y libertad hasta en la religión(yo soy la viva prueba de ello). Lo cierto es, que la cantidad de dinero utilizada, el lugar, que resulta extremadamente estratégico en la propia Guadalajara hacen que cualquiera con dos dedos de frente una los puntos y comience a preguntarse si todo este efecto estaba planeado desde un principio. En ese caso ¿cuál será el beneficio que busca la gente involucrada?

Dejo claro, que respeto la opinión de esos casi 3000 católicos que se oponen de manera tan vívida y apasionada en retirar una obra que a mi parecer es un bonito reflejo de nuestra cultura, al final de cuentas somos sincretismo.



Una última cuestión : Para aquellos que argumentan, que dicha escultura ofende al catolicismo aquí hay uno de ustedes que levanta la mano para opinar lo contrario. Es una bella obra de arte, y por supuesto que una clara representación de lo que somos.

Y para todos los no católicos que ya estan empezando a generalizar por las acciónes de estos 3000, les recuerdo que son una cantídad ínfima de nuestra muestra poblacional.


Rab Araujo.
Todos podemos llevarnos bien en este mundo



jueves, 9 de noviembre de 2017

Extraño los Juegos Completos


Quiero iniciar esto aclarando algo muy simple, no he jugado videojuegos toda mi vida como muchos argumentan. De hecho, soy Gamer desde hace 25 años sin descanso alguno (Actualmente soy un Paladín nivel 30).

Una vez presentadas brevemente mis credenciales es que puedo decir que sé muy bien de lo que hablo cuando digo, que estoy cansado de comprar mis juegos incompletos. Y eso me preocupa pues creo que no soy el único, ya que específicamente en estos días, la comunidad ha tenido un revuelo considerable con motivo de diversas prácticas que la bonita industria, aquella que alimenta nuestras ansias de transportarnos a los mundos virtuales, y que han ido revelando poco a poco.

Esto, puede que sea bastante malo para todos.

Actualmente, me encuentro jugando Dark Souls 2: Scholar of the First Sin. Juego que adquirí vía Amazon en una de aquellas ventas casuales que le encanta hacer a dicha página costando no más de $350 para PS4. Maldita ganga, de verdad que lo es.
Justo al escribir esto, me encuentro en la última zona de Drangelic, y este es tanto mi tiempo de juego total como mi nivel de personaje.


M guerrero “Artharyon” ha decidido dar una vuelta por el mundo para “levelear” un poco…y sin saber, encontró lo que parecía ser una flor de aspecto extraño, la cual siendo sincero,  entiendo cómo pude pasar por alto. Habiendo estado tan concentrado en intentar permanecer vivo la mayor cantidad de tiempo posible antes de que un gran ogro me asesine de una mordida uno tiende a dejar pasar esas cosas ¿saben?.

Dicha flor, sin embargo, me ha llevado gracias a su descripción a encontrar la entrada de lo que ahora sé, es uno de los 3 DLC´s que vienen incluidos en esta versión del juego.
Si, se ve exactamente tan maravilloso y gigantesco que ya he perdido una hora antes de llegar con el primer jefe de esta sección. Sección que me llevará a otras 2 nuevas de aproximadamente la misma extensión.


Todavía me falta encontrar las llaves de las otras 2 expansiones y ya siento que mis casi 3 días de juego podrían llegar a duplicarse.

Y ahí estoy, parado frente una fortaleza de hielo que me pide que la explore y que desgarre todos sus secretos con esa brillante Halberd del caballero oscuro cuando una idea llega de lleno inundando mi cabeza:

Toda esta gran experiencia por $350… pero 2 años después de que se publicó el juego originalmente.

No me gusta arruinarle la fiesta a nadie, mucho menos a mí mismo. Dark Souls 2 ha sido una experiencia gratificante como Gamer y no solo los digo como un juego más de la familia “Souls”. En general me estoy divirtiendo mucho con el reto, con el mundo y sobretodo con mi ya saturada consola de Sony.

Lo cierto es, que en su momento lo dejé pasar. Seguramente tenía muchas otras cosas que jugar (a veces se me juntan los juegos y no me da tiempo de acabar uno cuando ya estoy comprando otro nuevo). Hace 2 años no me molestó comprar “The Witcher 3” o “Metal Gear Solid V” a pesar de que sabía que ambos contarían con DLC. Simplemente quería jugar la experiencia tal y como era publicada. Eran juegos completos, juegos como las aventuras de Geralt de Rivia que prácticamente me dio más de lo que Dark Souls me ha dado tiempo después de su lanzamiento.


Incluso el juego de Kojima no me ha dejado nada a deber a pesar de la mencionada “misión final” que no fue incluida por aquellos últimos problemas que dieron por finalizada su relación con Konami. Tengo suficiente conocimiento del “Lore” de los juegos de Snake que no me hizo falta ver unas cuantas cut scenes más para que el juego me volara la cabeza cerrando con broche de oro una de las mejores sagas de ciencia ficción que he jugado en mi vida.

Eso fue hace un par de años, y ahora juegos como “Uncharted 4” o el maravilloso “Zelda Breath of The Wild” son experiencias que puedo considerar como completas. Y aunque también cuentan con DLC propio, ambos juegos son experiencias tan ajenas o integradas de manera interesante al gameplay del juego original que el pagarlo de verdad se siente como una opción para aquel que quiere sacarle mucho más a la experiencia original.

Y es aquí cuando veo que las “Grandes Desarrolladoras” se están esforzando lentamente en hacer que esto cambie por completo.

Analizando varios factores es como les digo que me estoy empezando a preocupar.
1.    Los juegos que se publican ahora SIEMPRE contarán con DLC independientemente del género, costo o tiempo de desarrollo.

2.    Dichos DLC, aunque sean anexos muy completos, poco a poco se sienten como algo que debo jugar pase lo que pase.
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3.    Las desarrolladoras no trabajan para mí, para ti ni para nadie SON UN NEGOCIO.
De esta manera, quiero aclarar que no pienso mencionar las artimañas y maléficos planes como los de la gente de EA o Activision y sus ridículas y absurdas “Loot Boxes”, eso es algo que discutiré en el futuro cercano.

Pero dando paso a las empresas que por lo menos hasta ahora me han dado experiencias completas en sus juegos como Nintendo, Naughty Dog, Bethesda y por supuesto CD Project Red empiezo a notar un patrón del consumidor que puede que les ponga contra las cuerdas si esto se empieza a generalizar.

Me refiero a Esperar a comprar el juego en su versión GOTY
La idea parece inofensiva por si misma, ahora mismo es cuando te estas diciendo. “Hey, de cualquier modo vas a comprar el juego querido Rab, deja de andar de paranoico” Y creo que tienes toda la razón joven Padda-1, la tienes y estoy feliz de que seas tan observador con las obviedades.

Pero para eso estoy aquí, es hora de que conozcas un bonito juego en negocios al que me gusta llamar “La navaja de la avaricia”. La cual funciona de la manera siguiente.

Gasto 100 millones en hacer un juego, debo tener una proyección de cuántos voy a vender en los primeros meses, si dicha proyección se cumple, la gente que suelta el dinero (AKA los inversionistas) estarán tranquilos, y seguirán soltando el dinero porque así funciona el capitalismo básico.


Hago juegos tan bonitos, que estoy cubriendo incluso las necesidades a futuro de mi compañía en desarrollar parte del juego con lo que me costó el desarrollo inicial para generar un DLC desde el principio, pero que sea de calidad aprovechando el total de mi fuerza de trabajo y capital para crearlo e irlo vendiendo posteriormente con el paso de los meses.

De esta manera la atención a mi producto (mi juego) va a continuar por un lapso mucho más largo y de cualquier modo al final, saco una versión donde pegaré todo el contenido completo y se lo venderé a los pocos usuarios que no estaban convencidos en un principio…

Bueno, eso suena bonito en papel. En términos simples es un plan muy sólido para generar la mayor cantidad de ganancias disponibles con un solo equipo y tiempo de trabajo para dar paso a nuevos proyectos a futuro (y eso sin considerar las curiosas y bien intencionadas microtransacciones)

-¿Qué va a pasar cuando el 50 o 60% de tu mercado meta se comience a transformar en ese jugador indeciso que espera a que salga la versión final como yo y aproximadamente 7 amigos estamos haciendo al día de hoy?

-¿Qué es lo que le depara a las compañías con comportamientos como este?

-¿Será esta una de las cuestiones por la que el problema de las Loot Boxes se está comenzando a descontrolar cual invasión de los Flood?

Sea como sea no hay respuesta clara en este momento. Pero solo puedo vaticinar, que de irse cumpliendo poco a poco estaremos en problemas como consumidores, por un efecto natural que ellos mismos provocan, eso… y porque no tenemos a ningún Master Chief a la mano.


Tal vez es muy pronto, pero comienzo a ver un poco gris ese horizonte.

-Rabstacus (Mi yo gamer)

miércoles, 13 de septiembre de 2017

Book Tag | Los 10 Pecados Capitales de Leer y Sorpresa





Nunca habíamos hecho uno de estos. Para nosotros fue muy divertido, además es interesante el saber este tipo de datos de los lectores.

jueves, 22 de junio de 2017

El día que me convertí en Librero (Parte 1)


Puedo recordar mis errores con claridad. Es uno  de aquellos lastres –creo yo- generado gracias a los genes heredados por mis padres. Vamos que de nada sirve maldecir al genotipo en estos casos. Sin embargo gracias a ello, puedo remembrarlos con claridad, a veces demasiada.
El tipo de persona que te dice que siempre se aprende del error muchas veces no tiene presente el peso que revivir una falla puede traer para una persona, para una consciente. En este caso, alguien como yo.

Podría llenar hojas y hojas con mis errores, podría hacer seminarios sobre ellos. Lo único malo es que muy probablemente nadie querría escuchar, leer o tal vez tomar una “Ted-Talk” con mi experiencia pues me llevaría mucho tiempo concluir una sola charla con todo aquello que va aunado a cada uno de dichos menesteres.

 Y llega un momento, un fatídico si es que se tiene suerte, en que el error no te deja continuar. Se interpone en tu camino cual mago gris encarándote en un estrecho puente de tu vida sin darte más opciones que arrojarte con todo el peso de tus miedos transmutados en forma de látigo llameante con tal de pasar del otro lado…o caer hacia el más oscuro de los precipicios de una mina enana.
Uno de aquellos momentos me frenó

La verdad estaba ahí tan clara que no me fue posible seguir engañándome:

Mi vida y lo que me hace feliz está unida directamente a los libros.

Ser lector es mi pasión. Y como era de esperarse fui un escritor “de closet” durante largo tiempo de mi vida. Un George Mcfly cualquiera, uno de esos comunes y corrientes intentando buscar la determinación necesaria para hallar una carrera que me “diera de comer” (pues siempre el problema se presentará cuando el ángel de la muerte te atrape por falta de alimento y no por enfermedad o por algún “microbusero” poco atento en viernes de quincena si es que uno llega a equivocarse en la elección en estos  peligrosos temas vocacionales).

Lo cierto fue, que cada uno tras otro de esos momentos de fallo me habían llevado hasta ahí. Y todavía recuerdo mi caer en la oscuridad de la más profunda desesperanza, larga y terrible…en un principio.

Con cada nueva duda que aparecía llenando mi ser con incertidumbre cada día –sí, dije que la caída fue larga- deteniendo mi pensamiento y mi actuar. No fue hasta estos momentos en que me percaté de que lo único que me importaba era estar ahí. Caer no era tan malo después de todo.
Tuve que estar en medio de aquella caída libre en que para percatarme de que en realidad yo no quería ir al otro lado de ese puente. En realidad, lo que yo quería desde un principio era darle las gracias a aquel mago, sonreír y lanzarme al vacío con un enorme suspiro, tal vez con suerte, al terminar la caída mi cuerpo impactará con algo de agua. Y es mi deseo compartir la única verdad que me ayudó al dejarme caer.

Equivocarse es lo correcto. Es necesario.

¿Cómo es que llegue a esto? Pues les prometí una historia y aquí la tienen:

Que cuente como antecedente práctico y detallado de cuál fue el camino del protagonista de la historia para entrar un poco en contexto. Su primer paso y error fue el enlistarse como aprendiz de hechicero blanco. Su andar por la escuela de medicina le trajo más penas que glorias lo cual le llevó a negar su naturaleza y continuar vagando por las peligrosas tierras de este reino llamado México. –Negó los libros y su amor por ellos- De ahí pensó que lo mejor sería optar por el andar de los mercenarios, comerciar con sus habilidades en un reino que, aceptémoslo, está hecho para la “tranza” y el engaño.

Con bríos renovados cometió su segundo gran error (deliberadamente omitiré sus decisiones en el amor para no hacer esto una comedia trágica). Así que se enlistó en la engañosa carrera de comercio internacional –nuevamente negó los libros- disfrutando de una repentina disminución de dificultad.
Fue en este momento que las cosas empezaron a cambiar. Y antes de que pudiera entenderlo el primero de los cambios que necesitaba llegaron a él. En aquel lugar conoció a un bardo con pinta de asesino. Una de aquellas personas que al igual que él había decidido engañarse por el honor familiar, empero, sin poder ocultar su profundo amor por las palabras justo al igual que nuestro héroe de poca monta.

Su primer maestro verdadero había llegado a su camino sin siquiera haberlo imaginado a manera de aquellos rufianes con palabras de ángel y rostro de maleante digno de ser detenido por los guardias reales al ser visto deambular por las noches muy seguramente por mero “exceso de maldad”.
Se creó una hermandad, se elevaron promesas hacia los cielos y se retó al destino con la certeza de que no habría otro camino más que aquel más peligroso. El cual lo llevaría sin lugar a dudas a arrojarse de aquel precipicio.

El tiempo pasó, el camino del mercenario comenzó a perder el interés en el poder económico para nuestro protagonista y al momento en que su maestro se perdió en su propio andar en dirección a las cálidas tierras del este, se separaron eligiendo mantener su promesa.
Nuestro héroe decidió retar al destino, intentó escapar hacia el norte hacia tierras extranjeras donde los meses pasaron y sus habilidades como montarás de las costas donde mantenía finos corceles (automóviles de lujo) al cuidado de un ojo atento –es decir trabajó en un parking playero- lo mantuvieron vivo y sirvió como una preparación mental.

En aquel puro estado de auto-exilio pudo darse la oportunidad, por fin, de acercarse por completo a los libros. La literatura lo mantenía con vida, la literatura demandaba un tributo mayor. Sabía que tenía que regresar, regresar a encarar el abismo. Y al hacerlo, descubrió aquello que el destino le tenía preparado…


jueves, 4 de mayo de 2017

Dark Matter - Blake Crouch





Pocas veces en mi vida he tenido el placer de leer algo que de alguna manera tiene una base tan interesante como este libro.

Hablemos un poco sobre la idea de los universos y las distintas dimensiones entre ellos.

Todo se puede reducir de manera sencilla al principio base el cual dicta que los seres humanos percibimos todo a través de nuestros sentidos. Uno entiende que vivimos sujetos a cuatro dimensiones fácilmente comprobables. Podemos traducir estos ejes dimensionales en los simples: Horizontal/Vertical/profundo y tiempo.

La vida del ser humano ha sido enmarcada en estas cuatro variables que al combinarse dan como resultado nuestra vida del día a día. Pero...¿qué pasa con el resto de las dimensiónes?...ya saben, aquellas que no podemos percibir de manera natural.

Para todos aquellos que deseen saber un poco más al respecto de los temas que trata esta novela les recomiendo muhoc el trabajo del señor Michio Kaku. Lo cierto es que no me canso de recomendar sus libros de divulgación científica. Siempre lo hace algo ameno y bastante disfrutable.

Esta novela es oscura y divertida al mismo tiempo. Corazones sensibles alejaos...quedan advertidos.